lunes, 2 de junio de 2008

Gaviotas

Las siempre ruidosas gaviotas se convierten en vecinas nuestras. Teniendo el mar a tan sólo un par de kilómetros, las terrazas del centro de la ciudad se convierten en lugares ideales para sus correrías.

Además de visitar los cercanos vertederos de la ciudad, de vez en cuando les gusta algo más fresco y suculento para llevarse al pico, así que andan batiendo las terrazas en busca de palomos bravíos que al igual que ellas, aquí en Málaga, abundan y suelen ser presa fácil para estas grandes depredadoras. A pesar de que a algunos les puedan resultar molestas, hay que reconocerles su gracilidad en el vuelo, siendo unas verdaderas acróbatas aéreas, con sus cuerpos aerodinámicos y estilizados, nos deleitan con sus maniobras casi imposibles.

En más de una ocasión, en comentarios con algunos vecinos, he apreciado un cierto rechazo hacia estas aves, dejan todo lleno de excrementos, son muy ruidosas, cuando subes a las terrazas si no te andas listo se te tiran encima, etc., puedo entender que no todos tenemos las mismas ideas y gustos, y tampoco vemos la naturaleza con los mismos ojos, pero desde mi punto de vista, primero las veo como parte de nuestra fauna y por tanto merecen todo el respeto y atención que pueden tener otras aves, y segundo a mí particularmente me agradan y las veo como aves muy interesante.