domingo, 22 de junio de 2008

La Alcazaba

La Alcazaba de Málaga, situada sobre el Monte Gibralfaro, se adapta perfectamente a su topografía, en cuya parte más alta se encuentra también el Castillo de Gibralfaro.

Se cree que posiblemente sus orígenes fuesen fenicios. Aunque lo que sí es cierto son sus orígenes romanos, a cuyos pies se encuentra el Teatro Romano y bastantes vestigios de esa época.

La alcazaba de Málaga fue residencia de reyes y gobernantes musulmanes y cristianos. Fue construida por Badis-Maksan, pero el emir cordobés Abderrahmán I entre los años 756 a 788, complementó el edificio con otras estructuras. En el año 1065 paso a poder del reino de Granada, momento en que se le realizaron nuevas obras quedando enriquecida y engrandecida.

La alcazaba, en su mayor parte construida en el siglo XI, fue Palacio y Fortaleza de los gobernantes musulmanes de la ciudad. Entre los siglos XIII y XVI el edificio se reformó y fusionó con el de Castillo de Gibralfaro. Tras el asedio que sufrió la ciudad en época de los Reyes Católicos, en 1487, tras un largo periodo de bloqueo, la ciudad se rindió ante los monarcas cristianos quienes enarbolaron su cruz y su pendón en la Torre del Homenaje. Continuando con sus cambios, reformas y usos, todo el recinto fue habilitado por Felipe IV en 1624 y Carlos III ordenó tirar las murallas para construir residencias.

La Alcazaba de Málaga es comparable en importancia con la de Almería, aunque con una arquitectura completamente diferente.

En origen se construyó para fines defensivos, por lo que se dotó con 30 torres y 20 puertas fortificadas en las que se utilizan recodos para dificultar el acceso. El conjunto está formado por dos recintos de forma alargada que se adaptan al terreno, y en su interior podemos encontrar jardines, baños, aljibes, etc.

Se pueden distinguir también unas fortificaciones de acceso que irían unidas a la muralla de la ciudad, y de las que destacan la Puerta de la Bóveda, construida en recodo para aumentar su valor defensivo, y la Puerta de las Columnas, que aprovechan fustes y capiteles romanos como material de construcción.

El Primer recinto amurallado o recinto inferior, al que se accede a través de otra puerta en recodo, llamada Torre del Cristo, por haberse utilizado como capilla durante muchos años, es un gran espacio que se adapta a la orografía del Monte Gibralfaro y que rodea por completo al recinto superior del que destacan el Patio de Armas, hoy día ajardinado, con un baluarte para la defensa costera en su cara sur, y la torre, que en el extremo oriental, da salida a la Coracha que la une con Gribalfaro. El Segundo recinto amurallado, está defendido en sus dos extremos, por el oeste por la Puerta de los Cuartos de Granada, que es su único acceso y que está muy restaurada y por el este por la Torre del Homenaje. La Torre del Homenaje es de mayor altura que las demás, y posee planta cuadrada.

En el interior del segundo recinto se encuentra el Palacio Nazarí, una parte fechada en el Siglo XI y otra de los siglos XIII-XIV, así como un interesantísimo barrio de viviendas del siglo XI de estilo hispanomusulmán, así como distintas estructuras árabes como una mezquita, el pórtico de Yeserías, un mirador, baños, etc. Estas construcciones están fechadas en distintas etapas árabes, entre los siglos XI y XIV.

Actualmente es de propiedad municipal y alberga el Museo Arqueológico.

Fue declarada Monumento Nacional en 1931. Se encuentra bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.