Aprovechando una estancia en casa de mi yerno, en Benalmádena, y gracias a la coincidencia de que su jardín da justo a una maravillosa vista de la Estupa de la Iluminación y cómo no, a la inmensa bahía y sus magníficas vistas, decidí dedicar unos momentos tanto del atardecer como del amanecer para tomar esa luz y esos detalles que hacen que la Estupa parezca distinta a cada momento y cada día.
En esta ocasión tan sólo se trata de seis tomas muy parecidas y que tan sólo encuadran el detalle en sí de la Estupa, pero seguro que en otra ocasión procuraré dedicar más tiempo, más días y otros ángulos para captar esa "magia" y halo de misterio que envuelve a este monumento budista.
El enclave donde se ubica, el propio pueblo de Benalmádena y esas maravillosas vistas que ofrece el entorno, hacen que se sienta algo "especial".
Aquí dejo esas fotos como testigo de lo que vi.
1 comentario:
Desde luego parece un lugar mágico al que has sabido captar toda su belleza a distintas horas.
Un abrazo.
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